La Tierra Firme, nuestras costas, comprendía territorios que fueron tempranamente comprometidos con los primeros conquistadores como Alonso de Ojeda en 1508, Bartolomé de las Casas y Gonzalo de Ocampo, ambos por separado vinieron en 1521. En 1530, Antonio Sedeño, motivado por el interés de la corona de Castilla en el "secreto de Trinidad", pretendía un dominio definitivo y control de la isla de Trinidad, arrebatándola a sus ocupantes, principalmente recién llegados indios caribe. Sin embargo, su objetivo real eran las tierras frontales y sucedáneas a Tierra Firme, la Guayana. Sedeño no fue el único interesado en ese "secreto" en el siglo XVI. En el horizonte de Paria, se hizo presente la expedición de Diego de Ordás, que zarpó desde San Lucas de Barrameda el 30 de octubre de 1530. Ordás venía con pliegos capitulados ante la corona para explorar doscientas leguas a partir de las bocas del río Amazonas y toda la costa entre este río y el cabo de la Vela, confines ya comprometidos con los alemanes, los Welser. La capitulación de Ordás, obtenida dos meses antes que la de Sedeño, estaba escrita en términos contradictorios, pero él confiaba en sus contactos y experiencia; había participado en la conquista de México junto al despiadado Hernán Cortés y confiaba más en su ejército que en sus papeles, aunque los límites de su gobernación estaban circunscritos a la isla de Trinidad; pero no pudo traspasar la frontera caribe.
En 1534, después de
la muerte de Ordás, la Audiencia de Santo Domingo comisionó a Alonso de
Herrera, como teniente de Gobernador, y a Jerónimo de Ortal para encargarse de
los asuntos y gobierno de Ordás. A su tiempo, Ordás y Sedeño murieron
envenenados: Ordás, "yendo a
Castilla, murió en la mar y en un serón lo echaron en ella". A Sedeño,
una esclava suya le introdujo un veneno letal en el plato, poniendo fin a su
vida; fue enterrado al pie de un árbol junto al río Tiznado en 1538. Ambos
decesos no fueron, de ninguna manera, el punto final de las disputas y
pretensiones; otros las continuaron (Ortal, Herrera, etc.).
Estas fechas marcan
el despoblamiento de Tierra Firme; consecuencia de la inexistencia de plata y
la infructuosidad de encontrar oro, buscado por Ordás hasta los raudales del
Orinoco y a lo largo del río Dulce o Esequibo (¿el Secreto de Trinidad? ¿El
Dorado?). Ese mismo secreto, en la década de 1570, se traga a Fernández de
Serpa, quien llega a Cumaná como gobernador capitulado con el reino por una
porción de tierra que iba desde el Amazonas al río Unare. Serpa también
pretende buscar el Dorado entrando por el occidente de su gobernación, y luego
de su muerte, atravesado por múltiples flechas en la garganta muere en la
vecindad de la quebrada de Jose; cerca de la actual Barcelona, le prosigue su
hijo, quien desaparece al pretender entrar por algún río del delta del Orinoco.
|
La balsa muisca, una pieza de orfebrería precolombina, elaborada por la cultura muisca (600 y 1600 d.C.) -centro de Colombia-. Museo del Oro de Bogotá. |
En 1579, el nuevo
gobernador de El Dorado, Antonio Berrío, quien la había heredado de Jiménez de Quesada; el fundador de Bogotá el 6 de agosto de 1538; luego de masacrar
a los nativos muisca; dateado por Ordás pensó que Guayana contenía El Dorado. Desde la isla de Trinidad, Berrío emprende una serie de expediciones que le permiten
conocer detalles corográficos de las misteriosas Guayana. Levanta una
detallada cartografía, donde ubica los pueblos autóctonos que la habitan,
indicando en ella sus recursos y estimaciones.
|
Antonio Berrío |
Entre 1584 y 1589 realiza 3 expediciones. Fue el accionar de Berrío quien desencadenó el poblamiento, dirigido desde la cabeza de su gobernación en la isla de Trinidad; lo que da luz a la creación de la Gobernación de Guayana. Hasta el nombramiento de don Carlos Sucre como Gobernador y Capitán General de Nueva Andalucía en 1729, quien toma posesión el 18 de agosto de 1733 como Gobernador de Nueva Andalucía, a quien se le había anexado sus antiguos territorios de Guayana. El cambio de jurisdicción se hace a partir del 30 de diciembre de 1733. Así permanece hasta 1762, cuando la corona nombra a Joaquín Sabás Moreno de Mendoza comandante general interino de la Comandancia de Guayana. El 5 de mayo de 1768 se ratifica esta subordinación "agregándole a la provincia de Guayana la comandancia general del Orinoco y Río Negro, cuyos linderos llegaban por el Sur hasta el Amazonas". El 28 de octubre de 1771 regresa la jurisdicción a Nueva Granada, hasta la creación de la Real Audiencia de Caracas en 1786, cuando queda definitivamente incorporada a Venezuela, como el resto de las gobernaciones de Tierra Firme; que, en tiempos de guerra, se unificaban en Capitanía General de Venezuela, bajo el mando del Capitán General en Caracas.
Cuando el 29 de
julio 1811, los diputados por la Provincia de Cumaná, se reunieron en la sala
de acuerdos para analizar la plausible Declaratoria de la Independencia
absoluta y total de las Provincias Unidas de Venezuela, aclarando que los
dignos habitantes de la Andalucía americana desean por momentos elevarse al
rango de libres e independientes. Para esa fecha, los territorios de la
Provincia de Cumaná no incluían la Guayana.
¿Cuáles eran esos
territorios de Guayana, que antes pertenecieron a la Andalucía americana?
Un retazo de tierras que comprenden, la
línea de costa, desde el Delta del Orinoco hasta el Río Esequibo; teniendo como
límite sur el río Amazonas.
|
Entre el río Orinoco y el Esequibo |
Es el trabajo de
Antonio Berrío, quien roba el forajido inglés, amante de la reina virgen,
Walter Raleigh. Son los mapas y cuadernos de notas de Antonio Berrío los que
usa el pirata para dar a conocer a fines del siglo XVI a la Guayana en Europa.
Desde esa fecha, son los deseos por nuestras tierras y desde ella su
conocimiento de las riquezas que encierran. Guayana (del Orinoco al Esequibo)
es nuestro Dorado presente y futuro. Como herederos caribe, también seremos
frontera humana para cualquier pretensión extranjera. Orgullosa la octava
estrella bolivariana, orgullosa todas ellas ...
Rommel Contreras /20-11-23
Serie: 𝓔𝓵 𝓣𝓻𝓪𝓼𝓹𝓪í𝓼 𝓭𝓮 𝓞𝓻𝓲𝓮𝓷𝓽𝓮; 𝓕𝓪𝓬𝓱𝓪𝓭𝓪 𝓐𝓽𝓵𝓪𝓷𝓽𝓲𝓬𝓪 𝓭𝓮 𝓥𝓮𝓷𝓮𝔃𝓾𝓮𝓵𝓪
Descargar en PDF